O a Minnesota, Iowa, Wisconsin, Toronto, Estambul, Budapest, Benidorm o Marruecos.... ¿qué más da?. La cosa es irse. No me digáis que no hace ilusión hacer los preparativos de los viajes.
Lo primero es la decisión de irse a algún lado en los días que te dan libres. Después, toca debatir sobre algunos posibles destinos. Y más tarde, cuando te dedicas un rato a buscar viajes y ver precios te encuentras de repente una superoferta que te acelera el pulso y te llena la cabeza de planes. Como quien no quiere la cosa ya te ves dentro de tu cabeza en el sitio en cuestión con el abrigo, los guantes y la bufanda paseando bajo la nieve o con el pantalón corto, la navaja suiza y la gorra oteando desde lo alto el inmenso desierto.
Siempre lo digo y no me cansaré de decirlo: mis padres me han enseñado que viajar es lo mejor. Y casi, casi tan genial es preparar el viaje. Cuanto antes lo empiezas a organizarlo parece que antes desconectas de la realidad porque, en cierto modo, parece que ya te estás yendo.
Y el sitio es importante por supuesto; pero hay momentos en los que da absolutamente igual porque lo que realmente importa es tu compañero de viaje. Y con él recorrer el mundo.
Ilsa le decía a Rick en la mítica Casablanca: "siempre nos quedará París". Yo siempre le diré a mi compañero de viaje: "siempre nos quedará todo lo que aún nos queda por conocer".
1 comentario:
... Y que más da donde sea, lo importante es tener el carné de la ilusión.
Yo ya tengo comprometido el próximo viaje, planificado los dos siguientes y una lista con por lo menos otros cinco o seis destinos a realizar.
¿ Y tu ?
Imagínate estos lugares, Marrakech (juego con ventaja), y las que empiezan por P como: Palmira, Pekín, Petra, etc.
Todo lo que podáis viajar y conocer siempre será poco.
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