lunes, 7 de enero de 2008

TRAINSPOTTING

Elige la vida. Elige un empleo. Elige una carrera. Elige una familia. Elige un televisor grande que te cagas. Elige lavadoras, coches y equipos de compact disc. Elige la salud, colesterol bajo y seguros dentales. Elige pagar hipotecas a interés fijo. Elige un piso piloto. Elige a tus amigos. Elige ropa deportiva y maletas a juego. Elige el bricolage, y preguntarte quién eres los domingos por la mañana. Elige sentarte en el sofá a ver en la tele concursos que embotan la mente y aplastan el espíritu mientras llenas tu boca de comida basura. Elige pudrirte de viejo cagándote y meándote encima en un asilo miserable siendo una carga para los niñatos egoistas y hechos polvo que has engendrado para reemplazarte. Elige tu futuro. Elige la vida.

¿Habéis visto Trainspotting? Comienza con una frenética persecución en la que el protagonista corre con todas sus fuerzas mientras resuenan las anteriores palabras. Esta mañana me ha pasado algo parecido. No ha sonado el despertador, he mirado el reloj y he saltado de la cama. Son las 7:37 y entraba a las 7:30. Me he puesto lo primero que he visto, me he lavado la cara y he salido pitando de casa. Cojo el coche, no hay ni un alma en la calle, voy solo por la carretera. Aparco el coche, me enciendo un cigarro, lo tiro a las dos caladas. Le digo al de seguridad que me abra (¡es fiesta y la puerta está cerrada!). Entro en el edificio, subo las escaleras corriendo, digo hola a mis compañeros. Me siento frente a mi ordenador y pienso: “no me levantaré de aquí hasta finales de marzo”.

Como Ewan McGregor interpretando a Renton en 1995, esta mañana he corrido mientras la rutina me pisaba los talones. Cabe pensar si vale la pena correr a lo largo de la mitad de tu vida para poder estar sentado en la otra mitad. ¿No sería mejor ir andando plácidamente siempre? Mientras corría he recordado que por mucho correr el tiempo no se acaba. Y aunque hasta marzo tenga que correr intentaré hacerlo mirando las vistas. Sin duda, elijo la vida. Suerte en la vuelta a la realidad.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

¡NO HAY DOLOR RUFIAN!

Por cierto, ¿sabes correr?, porque nunca te he visto hacer ejercicio, salvo aquella vez que te apuntaste a taekuondo con niños de 5 años...

Te dejo, que me voy corriendo a una reunión...

Bueno, qué coño, antes un cafetito...

Con dos bolas, y un palito.

PD: Lo mejor de la peli, la entrevista de trabajo al colgao del amigo, o cuando se caga en la cama....

Chaeras.

Anónimo dijo...

La verdad es que el principio de tu articulo refleja como me siento siempre con la vuelta al cole. Me entran duda existenciales sobre lo que quiero en la vida, porque la verdad es que esto es un mierda.
Por que no nos toca la loteria???!!!!
Un buen pellizco para dejar de trabajar seria la solucion a nuestros problemas!!
En fin, como en el final de tu articulo...a resignarse y llevarlo lo mejor posible....

alguien que encontrará lo que busca dijo...

Señores: calma con la vuelta al cole. Es duro pero hay que llevarlo con dignidad. Podemos plantearnos el hecho de poner un negocio familiar que nos saque de pobres... ¿qué os parece un karaoke?

Anónimo dijo...

¿Y una panadería en Ciudad Real?

Anónimo dijo...

¿Y una whiskeria?

Anónimo dijo...

¿Y una fábrica de sillones para que Carlos y Maribel cambien el suyo que es muy incómodo?

Anónimo dijo...

¿Y una labandería?

Anónimo dijo...

¿Y una fábrica de aviones para no vernos de Santa en Santa?

Anónimo dijo...

Busco curro y quiero volver a correr...

La cosa está jodida chavales... pero a currar... a correr... y a disfrutar cojona!! que son dos días. Musikito, lo que me gusta tu window... Un abrazo de esos que llenan el alma de margaritas.